Como bailarina y como medico, desde el inicio de mis estudios he visto todo tipo de lesiones en la danza. Ayudar a mejorar la salud de un bailarín, desde la elaboración de la historia médica hasta la propia exploracion, es muy diferente a la que se puede hacer en otro tipo de pacientes, ya que tanto la técnica de danza que se practique, hasta el tipo de calzado que se lleve, o los movimientos que se hagan, no son iguales a los de otras actividades o deportes. El bailarin es ante todo un atleta de las artes escéncas, y debe por ello estar en forma para bailar, no bailar para estar en forma. De esta manera, evitará lesionarse Una parte de mi trabajo es prevenir principalmente que sufra lesiones, y para ello imparto cursos, conferencias, realizo talleres sobre recuperación de una lesión específica, lesiones del pie, cadera y ayudo igualment al acondicionamiento físico. Otra parte importante de mi trabajo consiste evidentemente en tratar la lesion que ya sufra el bailarín, y especialmente en tratar de que se recupere lo antes possible para que pueda volver en buenas condiciones a una clase de danza o a su compañía. Cuando volví de los Estados Unidos en el año 90, inicié la Unidad de Medicina de la Danza y desde entonces, y con la colaboración de varios especialistes, me dedico a cuidar de que el bailarin pueda seguir danzando con plena salud. Muchas de las patologías que observo son ante todo errores de técnica, como un incorrrecto calentamiento o movimiento , una falta de tono muscular, mal equilibrio o el uso de calzado inadecuado. Las lesiones más frecuentes suelen ser por movimientos repetitivos, sobrecarga o un calentamiento insuficiente. A veces, solo variando dichos gestos y mejorando la técnica desaparece la lesion. Otras, tengo que poner un tratamiento y pedir pruebas complementarias, como radiografías u otras. Para aquellos que viven fuera de Barcelona o están de gira, realizo consultas y cursos online.